Muy lejos quedan los tiempos de gloria vividos en el viejo San Paolo de Nápoles, aquel laureado equipo de Maradona, Careca y Giordano que cosechó innumerables títulos en Italia y Europa. La escuadra napolitana se fue olvidando de aquellos laureos vividos y fue cayendo poco a poco hasta tocar fondo llegando incluso a desaparecer.
En 2004, y tras la quiebra del club, el productor cinematográfico de origen Napolitano Aurelio De Laurentiis, se convierte en accionista mayoritario del Nápoles que se encontraba en Serie C1 (equivalente a la Segunda división B en España). Llegando a Serie A en tan sólo tres años de presidencia, el 10 de junio de 2007.
En 2010 el Nápoles se consagra en Serie A consiguiendo su pase a Champions League, lo cual está siendo refrendado este año. Tan sólo 90 minutos y un 3-1 a favor conseguido en San Paolo contra el Chelsea separan al Nápoles de convertirse en uno de los ocho mejores equipos de Europa.
Una sólida plantilla sustentada con los goles de Ezequiel Lavezzi, Edinson Cavani, Marek Hamsik y los pases de Gökhan Inler. Han extinguido las aspiraciones en la máxima competición Europea de Villareal, Manchester City y Bayer de Munich. El próximo en pasar por la piedra napolitana previsiblemente sea el Chelsea de Villas-Boas.
Walter Mazzarri, peculiar técnico y ex-futbolista (ha dirigido a 6 equipos en su carrera como entrenador y nunca fue cesado, siempre se marchó por iniciativa propia), sin experiencia previa en Europa, dirige al actual escuadra napolitana, que ve en el trío Hamsik, Lavezzi y Cavani sus actuales estrellas.
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